Fue en el acto en el que el presidente recibió las cartas credenciales de los embajadores de ambos países, tras la suspensión de contactos durante la gestión de Jeanine Áñez.
El presidente boliviano, Luis Arce, recibió este miércoles las cartas credenciales de los embajadores de Irán, Mortessa Tabreshi, y de Venezuela, Alexander Yánez, en lo que constituyó el restablecimiento de las relaciones diplomáticas con esos países, rotas durante la gestión de facto de Jeanine Áñez.
El acto se realizó en instalaciones de la Casa Grande del Pueblo -la sede del Gobierno boliviano-, donde los diplomáticos se presentaron ante Arce para retomar sus actividades en el país, señaló un comunicado oficial.
En julio del 2019 Bolivia e Irán acordaron, entre sus últimas reuniones, avanzar en acuerdos de nanotecnología, fabricación de medicamentos y exportación de alimentos y otras áreas, pero a principios de este año Áñez anunció el cierre de la embajada boliviana en ese país, supuestamente por falta de presupuesto, y las relaciones diplomáticas entre ambos países se interrumpieron.
Ahora, con la presentación de las cartas credenciales, Bolivia e Irán retoman el trabajo conjunto que, además de esas áreas, incluyen otras como el desarrollo conjunto de la ciencia y la tecnología espacial con fines pacíficos.
Por otra parte, Áñez había desconocido la legitimidad del presidente venezolano Nicolás Maduro aceptando como embajador del país caribeño a José Cumare Hernández, enviado del opositor Juan Guaidó, quien se presenta como "presidente encargado" de Venezuela por nombramiento del Parlamento.
Ahora Arce aceptó la incorporación de Alexander Yañez como flamante embajador venezolano nombrado por Maduro.