La expresidenta brasileña Dilma Rousseff (2011-2016) subrayó el lunes la importancia de la democracia en América Latina frente a las guerras comerciales y legales del neoliberalismo. Asimismo, destacó los triunfos “que barrieron en la región y llevaron al restablecimiento de gobiernos populares en México, con Andrés ­Manuel López Obrador; en Argentina, con Alberto Fernández; en Bolivia, con Luis Arce; y en Ecuador, con la victoria de Andrés Arauz en primera vuelta”.

Al respecto, hizo hincapié, durante su participación en un foro virtual del partido mexicano Movimiento Ciudadano (MC), que están ante una inmensa concentración de ingresos y solo, con construir fuerzas políticas, movilizar a la población y construir movimientos populares, pueden combatir y reducir “de forma sistemática” la desigualdad.

Además, criticó al actual jefe de Estado brasileño, Jair Bolsonaro, por desmontar todos los sistemas de protección, militarizar el Gobierno y defender a torturadores y golpistas, lamentando que en Brasil “el neoliberalismo se combina con neofascismo”.

En este sentido, enfatizó que el neoliberalismo es el detonante de que los gobiernos “no estén preparados” para luchar contra la pandemia del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, deplorando que, por culpa de las desigualdades, el brote vírico haya afectado más a “los pobres, los trabajadores, las mujeres, los negros y los indígenas”.

La expresidenta brasileña condenó, de igual modo, los intentos de las élites, tanto locales como internacionales, por revertir el gasto social con el objetivo de imponer “la agenda neoliberal” en la región latinoamericana, a través de una guerra híbrida, instituyendo el nuevo patrón de golpe de Estado.

“Debemos ser independientes y capaces de crear sociedades democráticas, donde no haya espacio para golpes de Estado, ni el surgimiento de líderes neofascistas como Bolsonaro, que comprometen la economía de nuestros países”, recalcó Rousseff, mencionando el golpe de Estado de 2016 en su contra y el ocurrido contra el expresidente boliviano Evo Morales en 2019, entre otros, así como los juicios por corrupción contra los expresidentes Cristina Fernández, de Argentina, Luiz Inácio Lula da Silva, de Brasil, y Rafael Correa, de Ecuador.

A lo largo de los años, los golpes de Estado han sido una táctica de las autoridades estadounidenses para intervenir en los asuntos de los países latinoamericanos, provocando desequilibrios importantes en la región.

HispanTV