El Papa Francisco, rumbo a Irak

El Papa Francisco, rumbo a Irak

AnnurTv
Tuesday 23 de Feb.

El 2 de agosto de 1990 la República Iraquí recuperó la provincia de Kuwait. Le asistía derecho: la “pequeña fortaleza” había sido desgajada de su espacio nacional tras la Primera Guerra Mundial a través de acuerdos entre el Reino Unido de Gran Bretaña y la banda de salteadores del desierto Al-Sabagh. Entre ambos configuraron una “monarquía constitucional” –la más contradictoria de las fórmulas- y con el tiempo se dedicaron a explotar la riqueza petrolera en beneficio de los intereses occidentales. Entre aquella fecha y el 28 de febrero de 1991 los Estados Unidos, la OTAN y ejércitos aliados lanzaron una feroz ofensiva para colocar a los déspotas en el gobierno y retomar el control del oro negro. La Operación Tormenta del Desierto derivó en una victoria del Consenso de Washington y castigos económicos  intensos sobre la nación que orientaba el dictador Saddam Hussein, previamente aliado de los EE.UU. También permitió que la CNN se instalara como un narrador global.

Pero el anhelo de escarmentar la osadía iraquí llegaría mucho más lejos. Amparados difusamente en los atentados a las Torres Gemelas y al Pentágono en 2001 los Estados Unidos y la OTAN invadieron, directamente, Irak. La algarada sin sustento se extendió por todo el globo: el argumento central sostenía que Saddam poseía armas de destrucción masiva. Al finalizar la masacre, en el 2011, se supo que esos pertrechos no existían, pero sobre todo que desde el comienzo de la operación los atacantes tenían plena conciencia de eso. Durante nueve años las fuerzas aliadas desmembraron el país, asesinaron dirigentes políticos y civiles, sometieron a torturas colectivas a los invadidos y saquearon gran parte de las riquezas naturales energéticas y destruyeron santuarios religiosos de suma importancia para el mundo islámico. Sobre todo, el Estado norteamericano inició su decadencia financiando con recursos públicos empresas de armas y mercenarios que estiraron el martirio iraquí hasta lo indecible para engrosar su facturación.

 

RECUPERADOS. Así como Irak había iniciado un lento camino de recuperación en 1991, trunco por la nueva invasión, desde el 2012 busca su destino intentando recomponer la nación tras padecer el formidable arrasamiento. En todo este período, y pese a la presencia norteamericana en el territorio, el pueblo fue hallando modos de agrupamiento, tomando muy en cuenta sus valores espirituales vertebrados en derredor del islam shiita. Los contrastes con la República Islámica de Irán que habían llevado a una guerra fratricida impuesta entre 1980 y 1988 fueron quedando atrás y ambas poblaciones maduraron la importancia de coaligar esfuerzos para frenar el daño imperial. Los iraquíes desean y necesitan la paz, pero también se muestran sanamente emperrados en conseguirla a través de la autodeterminación. Quizás lo más asombroso de toda esta historia resulte, tras semejantes contiendas, la existencia del Estado de Irak en este año 2021.

En un gesto de profunda audacia y direccionalidad política, el Papa Francisco se hará presente, entre el 5 y el 8 de marzo, en Irak.

RESPALDADOS. La Oficina de Prensa vaticana publicó el programa del sorprendente viaje Apostólico que comenzará el con un vuelo desde el aeropuerto romano de Fiumicino a Bagdad, bajo el lema de “Todos son hermanos”.

La bienvenida oficial tendrá lugar en el aeropuerto de la capital iraquí, donde Francisco mantendrá un encuentro con el Primer Ministro Mustafa al Kazemi , en la sala VIP del aeropuerto, para luego continuar hasta el Palacio Presidencial; allí tendrá lugar la ceremonia oficial. Al final de una visita de cortesía al Presidente de la República en su estudio privado, el Papa pronunciará su primer discurso oficial ante las autoridades, los representantes de la sociedad civil y el cuerpo diplomático con los que se reunirá en el salón del Palacio Presidencial.

La primera jornada del Pontífice concluirá con un encuentro con los obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas, seminaristas y catequistas a los que Francisco dirigirá un discurso en la Catedral católica siria de Nuestra Señora de la Salvación de Bagdad.

La mañana del sábado 6 de marzo, Jorge Bergoglio dejará Bagdad y volará a la santa ciudad de Nayaf, al sur de la capital. Se trata de uno de los lugares más sagrados del Islam shiíta, donde se encuentra nada más ni nada menos que el santuario del Imam Ali ibn Abi Taleb. Aquí realizará una visita de cortesía al Gran Ayatollah Sayyd Ali Al- Husayni Al-Sistani, líder espiritual de millones de musulmanes alrededor del mundo y líder espiritual de las fuerzas de resistencia iraquíes, al término de la cual el Papa Francisco partirá hacia Nassiriya, a orillas del Éufrates, para mantener un encuentro interreligioso en la Llanura de Ur. Para esta ocasión está previsto un discurso del Papa. Por la tarde, tras regresar a Bagdad, la jornada concluirá con la celebración de una misa en la Catedral caldea de San José de Bagdad, una de las once del país.

Hay más y para nada light: El domingo 7 de marzo el Papa viajará al Kurdistán iraquí y a las Llanuras de Nínive. La mañana comenzará con un vuelo al conflictivo Erbil. En el aeropuerto, Francisco será recibido por el Presidente de la Región autónoma del Kurdistán iraquí y por las autoridades religiosas y civiles de esa Región. Además, mantendrá un encuentro con el Presidente y con el Primer Ministro de la mencionada Región autónoma del Kurdistán iraquí en el Presidential Vip Lounge del mismo aeropuerto. Desde allí, en helicóptero, el traslado a ¡Mosul!, ciudad desde hace años en manos del autodenominado Estado Islámico, donde habrá una oración de sufragio por las víctimas de la guerra en Hosh al-Bieaa, la plaza de la iglesia.

Esa misma mañana tendrá lugar el traslado del Papa en helicóptero a la ciudad asiria de Qaraqosh, en las Llanuras de Nínive, a pocos kilómetros de Mosul. Tras llegar al campo de aterrizaje, Francisco se trasladará a la iglesia de la Inmaculada Concepción para visitar a la comunidad de Qaraqosh, a la que dirigirá un discurso, y después rezará la oración mariana del Ángelus. Por la tarde se trasladará de nuevo a Erbil para celebrar la Santa Misa que presidirá en el Estadio Franso Hariri. Luego retornará a Bagdad. Desde allí, el Papa argentino partirá hacia Roma el lunes por la mañana al término de la ceremonia de despedida.

 

HERMANADOS. “Todos son hermanos” es el lema – tomado del Evangelio de Mateo – de la visita de Francisco a Irak, cuyo logotipo muestra al Papa en el gesto de saludar al país, representado en el mapa y por sus símbolos, la palmera y los ríos Tigris y Éufrates. El logotipo también muestra una paloma blanca con una rama de olivo en el pico, símbolo de la paz, que ondea en las banderas de la Santa Sede y la República de Irak. Sobre la imagen figura el lema de la visita en árabe, kurdo y caldeo.

Sucede que la otra “herencia” que dejaron los norteamericanos y la OTAN es una miríada de bandas terroristas presuntamente islámicas que combaten a pueblos y autoridades islámicas… por no ser lo suficientemente islámicas. También operan contra los enclaves cristianos en la zona, intentando perpetuar las dificultades generadas durante las invasiones occidentales. Por eso el jefe del Ejecutivo iraquí afirmó que esa visita “contribuirá a consolidar la estabilidad y difundir el espíritu de hermandad en Irak y en toda la región” de Oriente Medio. Al Kazemi destacó “los esfuerzos del Papa para limitar los conflictos, anteponiendo la sabiduría y la razón”.

Las acciones contrarias a la visita ya están instaladas por los grupos terroristas, que cuentan con buenas vías de difusión amparadas en redes que censuran opositores internos de Occidente pero brindan vía libre a la promoción del delito en la región. De allí que el primer ministro anfitrión advirtiera que “tanto el Gobierno de Irak como el pueblo y todos los grupos étnicos o religiosos miran con respeto y dan la bienvenida a esta honorable visita”. En la misma línea se manifestó el clérigo shiíta Muqtada al Sadr, afirmando que Francisco es bienvenido: “Nuestros corazones, antes que nuestras puertas, están abiertos a él”, afirmó Al Sadr, agregando que será bien recibido en la ciudad santa de Al Nayaf, en el sur de Irak, sede de la máxima autoridad religiosa shiíta, el Ayatollah Sayed Ali al Sistani, con quien Francisco se entrevistará.

En el ámbito cristiano, la expectativa es equivalente. Monseñor Basel Yaldo, Obispo Auxiliar de Bagdad y Coordinador general del Viaje de la Iglesia iraquí, expresó pocas horas atrás que “la visita del Papa es para nosotros un remedio para los acontecimientos que se produjeron antes: donde había violencia, hoy llega la paz, llega una autoridad que habla tanto al ámbito político como al eclesial. Y nosotros necesitamos esto. Así que la venida del Papa es para nosotros una especie de medicina: con él aquí podremos ciertamente entender su mensaje en profundidad”. Como se verá, nadie ignora la dimensión política de la gira. “Llevamos décadas esperando a un Papa – señaló – y para nosotros será realmente un acontecimiento histórico”.

 

AMENAZADOS. El volumen de los desafíos que implica la presencia papal se trasunta en este diálogo entre monseñor Yaldo y Vatican News:

VN. La iglesia de la Inmaculada Concepción había sido destruida por los terroristas. En este sentido, ¿qué significado tiene encontrarse con el Papa justo dentro de este edificio sagrado y herido, y volver aquí a celebrar?

MY. Es un signo de la tenacidad que tenemos, y de la tenacidad de la Iglesia en todo el mundo. Apoyar a una comunidad duramente golpeada, incluso restaurando un edificio, es un signo muy importante y significativo porque seguramente esta Iglesia fue quemada deliberadamente para dar un mensaje a este pueblo: “No deben estar aquí”. Volver con el Santo Padre aquí significa mucho y refuerza nuestra existencia aquí, significa volver a las raíces de nuestra historia y de nuestra fe, y nos dice que la Iglesia universal, representada por el Santo Padre, está con nosotros.

VN. En muchas partes de su país todavía hay guerra, estas son las noticias de las últimas horas. En general, ¿cuál es la situación en Qaraqosh? ¿La ciudad está pacificada? ¿Cómo se vive ahora el día a día?

MY. Desde que la ciudad fue liberada el 23 de octubre de 2016 no ha habido signos de violencia y por eso hemos vuelto a nuestras casas. El clima es muy tranquilo y pacífico, porque los cristianos de la ciudad somos mayoría y sembramos lo que tenemos, así que las cosas positivas son más que las negativas.  Aunque la visita del Papa es a Qaraqosh, donde la mayoría de los fieles son católicos sirios, invitamos a toda la Llanura de Nínive a participar en este evento. A los cristianos de todos los pueblos, de todas las iglesias que existen: ortodoxos, católicos, caldeos… Todos serán aquí invitados a participar y gozar con nosotros en este momento.

VN. ¿Existe el riesgo de que no pueda asistir a estos encuentros debido a la pandemia?

MY. También estamos trabajando en ello. La gente quiere respetar las normas sanitarias para reducir el contagio y no dejar que esta amenaza bloquee la llegada del Papa. Desde luego, tenemos muy presente este problema.

 

Es preciso añadir que el 3 de enero de 2020, el general iraní Qasem Soleimani, líder de Quds, fuerza élite de la Guardia Revolucionaria, fue asesinado en un ataque de los Estados Unidos en Irak. El Pentágono se adjudicó el martirio de Soleimani. La Guardia Revolucionaria de Irán también confirmó la muerte del héroe de 62 años, responsabilizando del hecho a una formación de helicópteros de la potencia del Norte. Tras el crimen, el ministro de Exteriores iraní, Mohamad Javad Zarif, expresó que la operación configuró un “acto de terrorismo internacional”.

(Ver: https://xn--lasealmedios-dhb.com.ar/2020/01/05/volveremos-peores-tres-apuntes-en-confianza/ )

 

MULTIPOLARIZADOS. Desde Irán, nuestras Fuentes aseveraron que la visita papal será un hecho de profunda significación para todos los pueblos del mundo pues manifestará el encuentro de las creencias monoteístas más importantes del planeta representadas por líderes de genuina inserción popular. Vale repasar la filosofía del Sagrado Corán para entender lo que esa observación trasunta: mente y corazón no se encuentran separados. Ninguno de los forjadores de la iniciativa ignora, por tanto, que la política y la religión se enlazan y gestan acciones de largo aliento asentadas en los intereses y las necesidades de la gente. Más cerca, puede evocarse la fórmula nada formal: un oído en el Pueblo, otro en Dios. 

Esos informantes señalaron que el afecto generado por el Papa entre los pueblos musulmanes es inédito y que el mismo se basa en ese tono de comprensión que mana de las homilías y declaraciones periódicas. Asimismo, pusieron de relieve la importancia que ha tenido, para llegar al acercamiento, la estabilidad de las políticas públicas de Irán y de Irak -con perfiles propios- destinada a garantizar la paz y el desarrollo interior. En ese andar sereno, pese a la vorágine de la política internacional, ha sido evaluado de gran valor el no haber caído en provocaciones belicistas que intentaron en ambos lados de la frontera encender los motores de los misiles. Las hubo; y las sigue habiendo.

Años atrás el Papa fue esencial para rasgar las puertas del tiempo y abrir el camino de la Multipolaridad: su rechazo a los intentos de norteamericanos y europeos por derrumbar Siria en modo iraquí resultó determinante para evitar un avance mortífero sobre la región. La voz de Francisco tenía cómo desplegarse. Las tropas rusas en la zona –amparadas por el gobierno constitucional sirio de Bashar al Assad-, el mítico portaaviones chino que con sólo decir acá estoy licuó una serie de análisis estratégicos, y la sólida presencia iraní en derredor, facilitaron el altavoz. Pues lo cortés no quita lo valiente.

Por entonces Francisco lanzó dardos direccionados sobre los responsables de proyectos invasivos. A lo largo de su gestión Bergoglio exigió a los protagonistas soluciones pacíficas y al mismo tiempo realizó un fino trabajo de enlace con todas las congregaciones religiosas que encarnan el sentir de los pueblos. “Estamos dolorosamente golpeados y seguimos con profunda preocupación lo que está ocurriendo en Siria, Irak, Jerusalén y Cisjordania, donde asistimos a una escalada de la violencia que involucra a civiles inocentes y sigue alimentando una crisis humanitaria de enormes proporciones”, dijo Francisco hace tres años ante 270 padres sinodales reunidos en el Vaticano. “La guerra lleva destrucción y multiplica los sufrimientos de las poblaciones“, agregó, mientras convocaba a rezar por la paz.

Ahora, amanece un evento que puede configurar un antes y un después.

Habrán observado los lectores que nadie dice nada al respecto. Nosotros, sí.

 

Fuente: Radio Gráfica /  La Señal Medios 


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