Los indígenas también advirtieron que, en el marco de la pandemia, el mandatario recomienda tratamientos químicos preventivos que serían dañinos para la salud.
Comunidades indígenas que viven en Manaus, Amazonas, usan mascarilla de protección como parte de las medidas contra la nueva pandemia de coronavirus (COVID-19), (Junio Matos - Agencia Anadolu).
La Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (APIB) denunció ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU una presunta política de exterminio aupada por el Gobierno de Jair Bolsonaro.
“Hemos vivido un momento muy grave en nuestro país. El actual Ejecutivo brasileño aplica una política que es extremadamente perjudicial para los pueblos indígenas (…) Estamos ante una política de exterminio, pedimos ayuda para detener el genocidio”, alegó Luiz Eloy Terena, abogado de la APIB, según declaraciones recogidas por la agencia Prensa Latina.
Eloy Terena destacó las graves consecuencias producidas por la pandemia del coronavirus (COVID-19) sobre las poblaciones nativas. El abogado de la APIB recordó que la semana pasada murió el último de los indígenas (de la etnia) Juma.
“Terena también reveló que por el patógeno y las invasiones ilegales de madereros en zonas de la Amazonia están en riesgo 114 pueblos indígenas que nunca estuvieron en contacto con el hombre blanco”, añadió Prensa Latina.
Los registros de APIB puntualizan que cerca de 50 mil nativos están contagiados de coronavirus y hasta la fecha van 978 muertos y 162 pueblos afectados.
Por su parte, y en contraste con la información de APIB, el Ministerio de Salud asegura que, hasta el 11 de febrero, 42.508 indignas se habían contagiado y 564 fallecieron.
Según el último censo nacional, cerca de 900 mil brasileños se reconocen como nativos.