“Las declaraciones de Blinken sobre un Yemen libre de influencias extranjeras son positivas”, tuiteó el alto funcionario de Ansarulá, Mohammed Ali al Huzí.

“Estamos (ahora) a la espera de actos como la retirada de elementos y expertos estadounidenses, y la neutralización de las armas norteamericanas y su retirada del campo de batalla. Esto sería consistente con las declaraciones del Sr. Blinken”, agregó en declaraciones recogidas por AFP. Arabia Saudí es un gran comprador de armas estadounidenses.

El domingo 14 de marzo, el portavoz de la diplomacia estadounidense, Ned Price, dijo que Blinken habló por teléfono con el enviado de la ONU para Yemen, Martin Griffiths.

Durante la conversación, Blinken destacó que EEUU apoya “un Yemen unificado, estable y libre de influencias extranjeras” y dijo que “no hay una solución militar al conflicto” que asola al país desde hace más de seis años.

La guerra saudí-emiratí-estadounidense contra Yemen ha sumido al país en la peor crisis humanitaria del mundo, según la ONU, y se ha cobrado decenas de miles de muertos, según ONG internacionales, sin mencionar los millones de desplazados y una población al borde del hambre.

A principios de febrero, el Ejército yemení y Ansarulá lanzaron una ofensiva para liberar la provincia petrolera de Maarib, el último bastión de mercenarios pro-saudíes en el norte, provocando la ira de Arabia y sus aliados occidentales que pidieron el fin de la ofensiva yemení.

Para el teniente general Yalal Al Ruwaishan, primer adjunto del ministro de Defensa en Sanaa, “el clamor internacional en torno a Maarib refleja el deseo de los países de agresión de no dar a los yemeníes la oportunidad de llegar a una solución política”.

Recordemos que el Ejército y Ansarulá están pidiendo el fin de la agresión militar saudí y del bloqueo antes de cualquier alto el fuego.

Fuente: Al Manar