El ejército israelí ha informado este jueves que un misil cayó en el sur de los territorios ocupados y activó las sirenas de ataques aéreos cerca del reactor nuclear israelí Dimona (en el norte del desierto del Néguev), pero no ha confirmado si ese régimen logró interceptar el proyectil.

En Twitter, las filas militares han comunicado los resultados de las pesquisas preliminares sobre la explosión, admitiendo que no se llevó a cabo una interceptación real del misil.

En declaraciones públicas formuladas sobre el hecho, el ministro de asuntos militares israelí, Benny Gantz, ha dicho que el proyectil fue disparado desde Siria.

Gantz ha explicado que los sistemas antimisiles de Israel habían intentado interceptar el misil, pero no tuvieron éxito. “En la mayoría de los casos, logramos otros resultados. Este es un caso un poco más complejo. Lo investigaremos y seguiremos adelante”, ha indicado.

El ataque podría haber terminado de manera diferente

Por su parte, el exministro de asuntos militares de Israel Avigdor Lieberman ha reaccionado en Twitter, señalando que el ataque sorprendió al premier israelí, Benjamín Netanyahu, “mientras [este] dormía”.

Desarrollando su advertencia, Lieberman alertó que “la caída de un misil sirio con una ojiva sobre Israel podría haber terminado de manera diferente”.

De hecho, han sido varios los informes que han resaltado la incapacidad de Israel para activar una respuesta adecuada frente a los ataques con misiles, mayormente ante el creciente poderío del Eje de Resistencia.

Tras el impacto del misil, los aviones de guerra israelíes han realizado ataques aéreos en Siria. Más tarde, la defensa antiaérea del Ejército de Siria ha informado que repelió el ataque del régimen de Tel Aviv contra las inmediaciones de la provincia de Damasco.

Ante los repetidos bombardeos israelíes contra objetivos militares o civiles en el país levantino, Damasco ha advertido que responderá adecuadamente y a su debido tiempo.

Hispan Tv