Según un nuevo informe publicado este martes, la organización pro derechos humanos AI ha señalado que tras terminar su presidencia del Grupo de los 20 (G20), Arabia Saudí ha intensificado “descaradamente” su persecución contra los defensores de los derechos humanos, además de aumentar las ejecuciones contra los activistas en los últimos seis meses.

El reporte de Al, titulado 'Arabia Saudí: Represión de la libertad de expresión tras la presidencia del G20', ha documentado cómo, nada más traspasada la presidencia del G20, las autoridades saudíes han condenado a por lo menos 13 personas, o han ratificado sus condenas en “juicios manifiestamente injustos” ante el Tribunal Penal Especializado de Arabia Saudí (SCC, por sus siglas en inglés).

“Después de una caída del 85 % en el número de ejecuciones registradas en 2020, Riad ha condenado a muerte a al menos 40 personas entre enero y julio de 2021, más que en todo 2020”, ha destacado la nota.

En este sentido, el informe resalta que el “breve respiro” en términos de la represión que coincidió con la presidencia de Riad de la cumbre del G20 en el pasado noviembre, ha mostrado que las “ilusiones de reforma” fueron simplemente una “campaña de relaciones públicas”.

“Tan pronto como se desvaneció la atención sobre Arabia Saudí por el G20, las autoridades reanudaron su despiadada persecución a quienes se atrevían a expresar sus opiniones libremente o criticar al gobierno”, ha denunciado Lynn Maalouf, directora de investigación de AI para Asia Occidental y el Norte de África.

Maalouf ha agregado que, en uno de los casos, el SCC impuso a un funcionario humanitario la “exorbitante” condena de 20 años de prisión por un simple tuit en el que había criticado las políticas económicas de Al Saud.

Asimismo, la nota puntualiza que otro ejemplo de la actuación del Tribunal ocurrió el pasado febrero cuando la activista de derechos humanos Israa al Ghomgham fue condenada a ocho años de prisión y a ocho años de prohibición de viajar por cargos relacionados con su “activismo y participación pacíficos en protestas antigubernamentales”.

En febrero de 2021, el príncipe heredero saudí, Muhamad bin Salman, prometió que Arabia Saudí aprobaría nuevas leyes y reformaría las actuales con el fin de “reforzar los principios de justicia, hacer cumplir la transparencia” y “proteger los derechos humanos”.

En este marco, el príncipe anunció planes para cuatro leyes fundamentales: Ley sobre el Estado Civil, Ley de Transacciones Civiles, Código Penal de Sentencias Discrecionales y Ley de Sistema Probatorio.

Sin embargo, el informe de Al ha recordado que las autoridades saudíes todavía no han publicado ninguna información acerca de la materialización de estas reformas prometidas.

De hecho, según las investigaciones de Al, al menos 39 personas permanecen actualmente entre rejas por su activismo, su labor de derechos humanos o sus manifestaciones verbales discrepantes en Arabia Saudí.

Fuente: Hispantv