La prisionera palestina de 25 años, Anhar al-Deek, madre de una niña llamada Julia, está en su noveno mes de embarazo y puede estar de parto en cualquier momento. La cautiva sufre de depresión bipolar por embarazo, según la Autoridad Palestina para Asuntos de Prisioneros, y necesita atención y cuidados médicos especiales, que por supuesto no están disponibles en las cárceles de la ocupación.
La prisionera palestina de 25 años, Anhar al-Deek, está a punto de dar a luz en una prisión israelí y envió un mensaje conmovedor, en el que se queja del dolor que está sufriendo y revela sus temores de tener a su bebé de forma absolutamente anormal y en condiciones inhumanas.
Anhar, la madre de una niña llamada Julia, está en su noveno mes de embarazo y puede estar de parto en cualquier momento. La cautiva sufre de depresión bipolar por embarazo, según la Autoridad Palestina para Asuntos de Prisioneros, y necesita atención y cuidados médicos especiales, que por supuesto no están disponibles en las cárceles de ocupación.
Las fuerzas de ocupación arrestaron a Anhar, oriunda de la ciudad de Kafr Nima, al oeste de Ramallah, en marzo pasado, cuando estaba embarazada de cuatro meses.
Anhar dijo durante una reunión con su abogado: “La prisión no está preparada para el parto y la crianza de los hijos. Las condiciones son muy malas".
El dolor de la prisionera y el embarazo no es lo único que destruye el cuerpo de Anhar, sino también “el dolor de la separación familiar y el temor de perder a su hija”, así lo expresó en el doloroso mensaje que envió desde la prisión Damon el miércoles.
En apoyo de Anhar, los activistas lanzaron una compañía de solidaridad en Twitter con el hashtag # Salvar_Anhar_Al-Deek, pidiendo a las organizaciones de derechos humanos que intervengan para salvarla a ella y a su feto.
Fuente: Al Mayadeen