Hama se sitúa en el eje que conduce a Homs, en el centro, y a la capital Damasco, que son ahora las dos únicas grandes ciudades en manos del Gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad.
La agrupación terrorista Hayat Tahrir Al-Sham (HTS) tomó la mayor parte de Alepo, segunda ciudad del país, y continuó su avance hacia Hama, más al sur; más de 800 personas, entre combatientes de ambos bandos y civiles, perecieron en ese avance.
Al entrar a Hama, los terroristas festejaron disparando al aire mientras en la vecina provincia, es decir Homs, parte de los habitantes empezaron a huir hacia Damasco o hacia el litoral mediterráneo, ante el posible ataque de los extremistas a esa ciudad.
Tras la captura total de Hama, los grupos terroristas apoyados por el extranjero tendrán en la mira la provincia de Homs como la próxima parada. Pero, para conseguirlo tendrían en el camino desde Hama hacia Homs, algunas ciudades y pueblos en el norte de la provincia de Homs, como Rastan y Talbiseh, donde sin duda se enfrentarán a la resistencia de las fuerzas sirias y sus aliados.
En este sentido, la Gobernación de Homs, en respuesta a los desarrollos actuales en el noroeste de Siria, ha declarado que se han implementado todas las medidas necesarias para preservar la seguridad en la provincia.
También ha instado a los residentes a confiar en fuentes oficiales del país para obtener información. La nota menciona que Homs ha acogido a decenas de familias desplazadas de Alepo, proporcionándoles todos los servicios adecuados.
Además, el Ejército sirio está enviando militares para reforzar sus posiciones en la estratégica provincia de Homs.
Homs, situada en el centro de Siria, se encuentra en la intersección de las principales rutas de transporte de norte a sur y de este a oeste, convirtiéndose en uno de los principales centros de transporte y comercio del país, con una importancia económica y militar significativa.
La ciudad de Homs, como centro de la provincia homónima, está ubicada a unos 160 kilómetros al norte de Damasco, la capital de Siria. Y es la tercera ciudad más importante de Siria, después de Damasco y Alepo, y está situada al oeste de la región desértica de Badiya al-Sham y a 30 kilómetros de la frontera con el Líbano.
Con una superficie de aproximadamente 42 000 kilómetros cuadrados, Homs es la provincia más grande de Siria, abarcando el 22 % del total del país.
Desde una perspectiva económica, Homs es crucial debido a su cercanía a los ricos yacimientos de petróleo y gas en el este del país.
Esto no solo eleva su valor económico, sino que también la convierte en un punto estratégico para el transporte de recursos naturales.
La ciudad está conectada por carreteras que llevan a los puertos de Latakia y Tartus en la costa mediterránea, facilitando el comercio y el suministro de bienes.
Homs presenta una composición demográfica diversa, con sunníes, alauitas, cristianos y otros grupos, reflejando la diversidad étnica y religiosa de Siria.
Esta diversidad ha sido un factor de tensiones políticas y sociales en la región, aumentando la importancia política de Homs.
Homs es la ciudad más importante entre Hama y Damasco, ubicada a unos 46 kilómetros de Hama a través de la autopista M5, distancia que se puede recorrer en 48 minutos en un día normal.
Actualmente, los terroristas están a 218 kilómetros de Damasco, distancia que se recorre en menos de tres horas en un día normal. Si Homs cae, la distancia a Damasco se reduciría a 163 kilómetros, recorrido que tomaría dos horas y quince minutos en coche.
Aunque en condiciones de guerra, el trayecto sería más complicado. Homs es el punto de convergencia de las principales rutas de comunicación desde el este de Siria y la costa hacia Damasco. La posible caída de Homs cambiaría radicalmente las dinámicas de poder en Siria. Eso también implicaría el riesgo de asedio y caída de los puertos estratégicos de Latakia y Tartus, que son líneas rojas para Rusia.
Pero, no debemos olvidar que a medida que nos acercamos al centro de Siria y Damasco, aumenta la concentración de chiíes sirios, que forman parte de las fuerzas de resistencia popular, así como las tropas del ejército sirio que han retrocedido, hecho que frustraría los planes golpistas de los extremistas apoyados por el extranjero.