“Nuestra enemiga: parte de la gran prensa, ella no nos dejará en paz, si creemos en ella será el fin de todos”, advirtió el viernes el mandatario en su cuenta de Twitter, desde el hospital donde se recupera de la cuarta operación a la que fue sometido, tras el atentado ocurrido durante un acto de campaña en septiembre del año pasado.

En su tuit, el capitán retirado del Ejército insistió en hacer frente la prensa. “Mientras nos peleamos entre nosotros el enemigo se fortalece, no podemos agradar a todo el mundo”, escribió.

Bolsonaro, que se encuentra internado en un hospital de San Pablo, anunció que no retomaría el cargo este viernes, sino el próximo martes, ya que fue postergada la retirada de una sonda nasal

La semana pasada, el mandatario reforzó sus ataques a los medios al presentarse en el Palacio de Alvorada, residencia oficial en Brasilia, con diarios en la mano para señalar las supuestas “mentiras” allí publicadas.

“Es preocupante el ataque a la prensa independiente o a la que el Gobierno no controla”, ha declarado, por su parte, el relator de la Organización de los Estados Americanos (OEA) para la Libertad de Prensa, Edison Lanza.

A pesar de su estado de salud, Bolsonaro continuó publicando mensajes en las redes sociales en los últimos días. El jueves por la noche, se comunicó en vivo desde una habitación del hospital para destacar las “últimas buenas noticias del Gobierno” y recordar el “milagro” de haber salido con vida de la puñalada que recibió en el abdomen.

El jefe de Estado también arremetió contra un periodista brasileño que grabó las conversaciones privadas que mantuvo con la nuera de Bolsonaro y que luego publicó en un extenso reportaje detallado.

Un estudio publicado en marzo por el diario O Estadão mostró que, en poco más de dos meses del Gobierno, Bolsonaro utilizó por lo menos en 29 ocasiones las redes sociales para criticar, cuestionar o ironizar el trabajo de la prensa. Esto supone una media de un mensaje de este tipo cada tres días.  

Bolsonaro, apodado “el Trump brasileño”, por su discurso misógino y racista, así como por su defensa del derecho a portar armas, declaró abiertamente en 2018 que en su campaña electoral tomó como ejemplo modelo a su par estadounidense, Donald Trump. 

Fuente: Hispantv