El exjefe del Mossad amenazó de muerte a la fiscal de la CPI para que dejase la investigación de crímenes de guerra israelíes, revela un diario británico.
Una investigación exclusiva del periódico The Guardian encontró que Yossi Cohen, exjefe del Mossad, la agencia del espionaje israelí, amenazó supuestamente desde 2015 a Fatou Bensouda, quien como fiscal jefe de la Corte Penal Internacional (CPI) abrió un examen preliminar para establecer si Israel cometía crímenes de guerra y de lesa humanidad en medio de la ocupación de territorios palestinos.
A partir de entonces, Bensouda y sus colaboradores empezaron a recibir advertencias de que la inteligencia israelí estaba “interesada en su trabajo”. Inicialmente, Cohen habría tratado de convencer a la fiscal para que cooperara con Israel y, al obtener una negativa, inició con las amenazas.
“Deberías ayudarnos y dejarnos cuidar de ti. No querrás meterte en cosas que puedan comprometer tu seguridad o la de tu familia”, es solo una de las amenazas que habría lanzado Cohen a la fiscal, conforme la publicación británica.
El exagente también habría interceptado a la familia de la fiscal. Incluso, alcanzó a grabar conversaciones de su esposo y luego las difundió para tratar de desacreditar a Bensouda.
Según el diario mencionando fuentes israelíes, Cohen actuaba como “mensajero no oficial” del primer ministro Benjamín Netanyahu y fue autorizado por el alto nivel del régimen de Tel Aviv para accionar las presiones contra la fiscal, al considerar que sus pesquisas planteaban una amenaza de procesamiento contra el personal militar sionista.
El desenlace de la indagación de la CPI puesta en marcha en 2021 contra Israel ocurrió la semana pasada cuando Karim Jan —sucesor de la fiscal Bensouda— anunció que solicitaba una orden de detención contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y su ministro de guerra Yoav Gallant, por sus medidas en la guerra en curso en Gaza.
La acusación de la CIJ incluye el señalamiento a Israel de atacar a civiles y utilizar hambre como método de guerra durante los ocho meses que completa el conflicto en la Franja de Gaza.
Las amenazas de Israel no solo apuntaron a Bensouda, el actual titular de la CPI denunció amenazas por su orden para arrestar a Netanyahu y Gallant como responsables de “la muerte por hambre de civiles como método de guerra”, de “causar voluntariamente un gran sufrimiento o heridas graves”, “tratamiento cruel”, “asesinato intencionado o asesinato como crimen de guerra”, “ataques contra población civil”, “exterminio”, “persecución” y “otros actos inhumanos”.
La semana pasada, además de la orden de arresto contra Netanyahu y Gallant, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) exigió la suspensión inmediata de las actividades militares de Israel en Rafah, ciudad en el sur de Gaza.
El total de víctimas mortales de los ataques israelíes en la Franja de Gaza desde el 7 de octubre supera los 36 000 palestinos, según el Ministerio palestino de Salud.