Recientemente, una delegación argentina viajó a Washington para desarrollar un proyecto de cooperación militar, acordado durante la visita del mandatario estadounidense, Barack Obama, al país suramericano. Según expertos, la base militar en Ushuaia, Tierra del Fuego, se considera la más polémica porque sus límites provinciales se extienden hasta la Antártida, la mayor reserva de agua dulce congelada del mundo. Elsa Bruzzone, especialista en temas de geopolítica para el Centro de Militantes para la Democracia Argentina (CEMIDA), afirmó a TeleSur que con la excusa de fines científicos, Estados Unidos siempre ha instaladas sus bases en zonas donde hay recursos naturales altamente estratégicos: agua, tierra fértil para producción de alimentos, minerales, hidrocarburos, biodiversidad. Ya la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner había impedido en 2012 la instalación de una base del Comando Sur de los Estados Unidos en la provincia del Chaco, en el norte del país. Por su parte, el gobierno de Macri justifica la instalación de la base militar estadounidense en Ushuaia, alegando que en el lugar se realizarán tareas científicas. Para Bruzzone, EE.UU. busca cerrar el cerco sobre todos los recursos naturales que tenemos en nuestra América, en alusión a las bases militares en Centroamérica y el Caribe, así como las de Colombia, Perú, Chile, Paraguay, junto a la base militar de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en las islas Malvinas. El diario estadounidense The New York Times propuso en su momento que, dada la nueva coyuntura política que se vive en Latinoamérica, es el momento propicio para que el Gobierno de EE.UU. aumente su influencia en la zona. Fuente: Al Mayadeen