En la poesía mística musulmana hay muchos nombres destacados. Entre ellos es inevitable llegar al de Yalāl ad-Dīn Muhammad Rūmī, cuya poesía ha servido para que muchos nos acercáramos a la lírica oriental.
Yalāl ad-Dīn Muhammad Rūmī nació el 30 de septiembre de 1207 en Balj (actualmente, Afganistán). Es importante señalar que en todo el mundo se le conoce simplemente como Rumi, que hace referencia a su lugar de nacimiento; se utiliza para indicar que alguien es originario de la Anatolia romana, la tierra de Rum.
Cuando tenía 12 años Yalāl ad-Dīn Muhammad Rūmī debió comenzar un camino de exilio junto a su familia, huyendo de la invasión de los mongoles. Vivió así en diversos lugares, entre los que se destacan sus recuerdos de Bagdad, La Meca, Jerusalén y Damasco. Su interés por la literatura y el pensamiento desde pequeño, lo llevaron a conocer a importantes eruditos de la época y a comenzar temprano a desarrollar una estética y un pensamiento que lo acompañarían para siempre.
Cuando conoció al Jeque Attar, éste quedó tan impresionado que le regaló una copia del Libro de los Secretos diciéndole a su padre que su hijo serìa un agitador de corazones en el mundo entero. Y no se equivocó. Después de unos años de peregrinaje la familia se instaló definitivamente en Konya (Turquía), un lugar relativamente seguro y tranquilo para la vida, a salvo de las crueldades de los invasores. Allí terminó de formarse el poeta y maduró completamente.
Gracias a la guía de su padre, Rumi se encaminó hacia la espiritualidad y se adentró en los misterios del Sufismo. Su pasión por el pensamiento le llevaron a asumir una rutina extrema de ayuno, meditación y trabajo intelectual. Posiblemente gracias a esta buena predisposición es que pudo afrontar una vida poética tan fructífera que le cambiaría la vida a cualquiera que se acercara a sus palabras.
Rumi falleció en Konya el 19 de diciembre de 1273. Este día se lo celebra especialmente en su ciudad natal, alabando las maravillas creadas por este poeta místico sufí.
Este autor ha sido absolutamente relevante para la literatura universal puesto que su estética ha influido tanto a la literatura urdú y persa como turca, permitiendo así unos cruces culturales fascinantes y prolíficos. Pero su poesía no sólo es popular en países como Afganistán o Irán, también en numerosos países de occidente, gracias a las diversas traducciones que ha recibido su obra.
Entre los temas principales de sus enseñanzas y su poesía habría que señalar que se destaca la unidad entre cuerpo y espíritu. Un viaje a través de la indagación del ser es lo que encontramos al leerle.
Si quisiéramos acercarnos a su ideal podríamos leer algunas de las obras que se encuentran disponibles en nuestro idioma, tales como Poemas sufíes, 150 cuentos sufíes o los maravillosos Poemas de amor de Rumi.